viernes, 17 de abril de 2009

Se tranca la emisión de cartas de crédito para importaciones

El Universal: "El declive de los precios del petróleo disminuye la disponibilidad de divisas y trastorna la fluidez de las importaciones, variable clave para asegurar el abastecimiento en el país. Mauricio Caycedo, presidente de la Cámara Venezolana del Envase, afirma que "desde hace tres meses, la banca nacional no abre cartas de créditos para importaciones de materias primas e insumos a ninguna de las empresas del sector". Al mismo tiempo, Teresa López, directora ejecutiva de la Cámara Venezolana de Importadores, Fabricantes y Distribuidores de Productos Lácteos (Cavelácteos) confirma retardos de tres meses en la recepción de cartas de crédito para importar a través del convenio Aladi. Las cartas de crédito son un eslabón imprescindible en la cadena del comercio internacional. Básicamente, es un mecanismo donde los bancos venezolanos, que representan a las empresas importadoras, le aseguran a una entidad financiera, que opera con el exportador, el pago de la mercancía. Para cumplir con este paso, un grupo de bancos venezolanos entregan divisas de sus propios bolsillos, principalmente a través de sucursales en el extranjero, que recuperan cuando Cadivi autoriza la entrega de dólares al importador. Otro grupo de entidades financieras, le exige al importador, que coloque los dólares previamente para proceder a abrir la carta de crédito. El problema, explican fuentes bancarias, es que Cadivi no ha autorizado a tiempo la entrega de divisas y ante la merma de los dólares disponibles, la mayoría de las instituciones financieras opta por suspender la entrega de cartas de crédito. El retraso del organismo encargado de distribuir los dólares al tipo de cambio oficial con las entidades financieras, tomando en cuenta las operaciones de cartas de crédito, otras órdenes de pago en divisas y consumos de la clientela en el exterior a través de tarjetas de crédito, asciende a mil millones de dólares, de acuerdo con banqueros consultados".

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